Los All Blacks fueron muy superiores y golearon a Los Pumas en la semifinal del Mundial. Un equipo sin fisuras que sacó amplias ventajas y llegó, con comodidad, a su quinta final del mundo. Los Pumas irán por la medalla de bronce ante el perdedor de la semi de mañana. Argentina 6 – Nueva Zelanda 44.

Will Jordan, imparable para Los Pumas. Foto: Getty

En la previa, el argumento de la esperanza eran los dos triunfos conseguidos por Los Pumas en los últimos tres años y se sabía que la chance de repetir una victoria como las de Parramatta y Christchurch dependía de una defensa granítica. En aquellos dos partidos el porcentaje de eficiencia en el tackle había sido superior al 90%, hoy fue del 73%. Si bien no basta una estadística para explicar un resultado, ese número es contundente y refleja una defección que no es nueva en el seleccionado argentino. La bandera de la defensa no se izó en este mundial. Tal vez David Kidwell, el entrenador neozelandés especialista en defensa contratado por la UAR, deba dar alguna explicación al respecto, porque las defecciones no estuvieron solo en los tackles errados sino también en la organización defensiva.

Los All Blacks congelaron muy rápido la pasión y los sueños que traían los hinchas argentinos en la previa del partido, porque la diferencia entre un equipo y otro no se limitó a la defensa permeable de Los Pumas, que hoy fueron superados en todos los aspectos del juego y durante todo el partido. Lo de Nueva Zelanda fue quirúrgico, no fallaron en nada y cada vez que llegaron a las 22 argentinas, marcaron. Y marcaron de todas las formas posibles: con la potencia de sus fowards en el maul, con la perfección para hacer volar la pelota y llevarla hasta Will Jordan, con los aciertos individuales y, siempre, con la preeminencia en el contacto físico. La superioridad en los rucks fue abrumadora.

Hubo momentos de dominio territorial argentino, pero Los Pumas no mostraron variantes de ataque y siempre fueron muy predecibles, favoreciendo a la sólida defensa neozelandesa. Sucesiones de fases sin avanzar un metro, hasta que llegaba el error que generaba una pérdida o un penal. Realmente fue una mala noche del equipo argentino, que no alcanzó el nivel de un partido de esta magnitud. Fue la mayor diferencia en el resultado de todas las semifinales mundialistas jugadas.

El penal marcado por Boffelli a los 33′ generó la ilusión de que Los Pumas estaban en partido pero todo se desmoronó con el try de Shannon Frizell, que entró caminando al ingoal luego de que el elusivo Mark Telea (parecía enjabonado) esquivara tres tackles. Ese final de la primera etapa y el try de Aaron Smith al comienzo de la segunda, terminaron de desmoronar las chances argentinas. Los últimos 35 minutos estuvieron de más. Quedó la vergüenza deportiva de los Pumas para enfrentar a un equipo tan superior y el buen nivel mostrado por Marcos Kremer y Mateo Carreras, junto a Emiliano Boffelli, los tres mejores argentinos del mundial. No mucho mas que eso para rescatar. Los All Blacks siempre controlaron el partido y Argentina nunca puso en peligro el ingoal rival. Desde el kick off estuvieron muy lejos de la final soñada.

Isa y Kremer, dos que estuvieron a la altura. Foto: UAR / Gaspafotos

Una derrota dura, inapelable, que rompió el sueño de levantar la Copa Webb Ellis, pero el viaje por la Copa de Francia todavía tiene una escala. El próximo viernes Los Pumas jugarán por el tercer puesto contra el perdedor de Inglaterra – Sudáfrica. Es el partido que, en la previa de las semis, nadie quiere jugar, pero el recuerdo de 2007 es una buena muestra de que no es un duelo menor. Los jugadores argentinos, de inmediato, deberán olvidar esta mala noche, enfocarse y encontrar la motivación para ir por el bronce y seguramente para todos, jugadores e hinchas, no habrá mayor estímulo que tener enfrente a Inglaterra. Veremos qué sucede mañana pero sería bueno una revancha con el seleccionado de la Rosa. Mientras tanto, a recuperarse del golpe de hoy y empezar a soñar con una medalla. Los Pumas se ganaron el derecho a quedarse en París hasta el último fin de semana del Mundial.

Daniel Dionisi 

Síntesis

Los Pumas: 1. Thomas Gallo (26m ST, Joel Sclavi), 2. Julián Montoya (capitán; 22m ST, Agustín Creevy) y 3. Francisco Gómez Kodela (10m ST, Eduardo Bello); 4. Guido Petti y 5. Tomás Lavanini (ST, Matías Alemanno); 6. Marcos Kremer, 7. Juan Martín González y 8. Facundo Isa (22m ST, Rodrigo Bruni); 9. Gonzalo Bertranou (10m ST, Lautaro Bazán Vélez) y 10. Santiago Carreras (25m ST, Nicolás Sánchez); 11. Mateo Carreras, 12. Santiago Chocobares (22m ST, Matías Moroni), 13. Lucio Cinti, 14. Emiliano Boffelli y 15. Juan Cruz Mallía.

Entrenadores: Michael Cheika, Felipe Contepomi, Andrés Bordoy, Juan M. Fernández Lobbey David Kidwell.

Nueva Zelanda: 1. Ethan de Groot (16m ST, Tamaiti Williams), 2. Codie Taylor (10m ST, Samisoni Taukei’aho) y 3. Tyrel Lomax (16m ST, Fletcher Newell); 4. Samuel Whitelock (20m ST, Brodie Retallick) y 5. Scott Barrett; 6. Shannon Frizell, 7. Sam Cane (capitán; 25m ST, Dalton Papali’i) y 8. Ardie Savea; 9. Aaron Smith (16m ST, Finlay Christie) y 10. Richie Mo’unga; 11. Mark Tele’a, 12. Jordie Barrett, 13. Rieko Ioane (20m ST, Anton Lienert-Brown), 14. Will Jordan y 15. Beauden Barrett (16m ST, Damian McKenzie).

Entrenadores: Ian Foster, Joe Schmidt, Scott McLeod y Jason Ryan.

Primer tiempo: 5m, penal de Emiliano Boffelli (LP); 11m, try de Will Jordan convertido por Richie Mo’unga (NZ); 16m, try de Jordie Barrett (NZ); 34m, penal de Emiliano Boffelli (LP); 38m, penal de Richie Mo’unga (NZ), y 42m, try de Shannon Frizell (NZ). Resultado parcial: Los Pumas 6 vs Nueva Zelanda 20.

Segundo tiempo: 2m, try de Aaron Smith (NZ) convertido por Richie Mo’unga (NZ); 9m, try de try de Shannon Frizell convertido por Richie Mo’unga (NZ); 22m, try de Will Jordan (NZ), y 33m, try de Will Jordan (NZ). Incidencia: 25m, amonestado Scott Barrett (NZ).

Resultado final: Los Pumas 6 vs Nueva Zelanda 44.

Arbitro: Angus Gardner (Australia)

Assistant referee 1: Nic Berry (Australia)

Assistant referee 2: Karl Dickson (Inglaterra)

TMO: Ben Whitehouse (Gales)

Cancha: Stade de France, París, Francia.

Fuente: Prensa UAR