Crusaders y Sharks llevaron un espectáculo rugbístico impresionante nada menos que a la Catedral del rugby, Twickenham, en la primera vez que el Súper Rugby se traslada fuera de los países de la Sanzar. El viaje se debió a que Crusaders no puede jugar de local en Christchurch y surgió esta posibilidad para, además, juntar fondos para los danmificados por el terremoto.

Pagaron su ticket 35.094 personas.

Ganaron los Crusaders por 44-28, en un partido de otra dimensión, con 9 tries, con la pelota viva los 80 minutos, casi sin lines, casi sin penales, casi sin kicks y con show de pases de todas las formas posibles.

La dupla 10-12 entre Dan Carter y Sonny Bill Williams -el que viene del Rugby League, que es también boxeador y que debutó antes en los All Blacks que en el Súper Rugby- está signada para hacer desastres en las defensas contrarias. Vean el segundo try, apoyado precisamente por el apertura. Y los backs neocelandeses, jóvenes en su mayoría, también son un espectáculo.

Aquí, un compacto del partido. Presten atención al primer try de Crusaders: 10-11-1-14.

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