El viaje que el seleccionado de Buenos Aires iniciará el miércoles por Sudáfrica tiene un significado aún mayor a las giras que los equipos de rugby de la Argentina suelen realizar a esta altura de la temporada. Además de la preparación con vistas al campeonato Argentino que arrancará el 6 de marzo, la Unión de Buenos Aires (URBA) va por un objetivo bastante ambicioso: tratar de insertarse en el futuro en las poderosas competencias internas de Sudáfrica.
Esa fue una de las principales metas que se fijó José Cafasso cuando asumió la presidencia de la URBA. Y esta gira es el primer paso. La elección de Sudáfrica no es antojadiza. Hay fuertes lazos históricos con la Argentina (allí, en 1966, nacieron Los Pumas), se practica un rugby de primerísimo nivel y, además, existe la ventaja de la proximidad geográfica: un vuelo directo de algo más de 7 horas une Buenos Aires con Ciudad del Cabo.
El hecho, a simple vista, representa una nueva falta de sintonía entre la URBA y la Unión Argentina de Rugby (UAR), cuyas próximas autoridades (se eligirán en marzo) también tendrán entre uno de sus tantos temas buscar el modo de ingresar a alguna de las competencias que se dan en el plano internacional. Y si bien para Los Pumas se irá por un calendario que incluya a selecciones y no a combinados, existe el riesgo —siempre y cuando ambos propósitos se pueden cumplir, para lo cual habrá que esperar bastante— de que se superpongan las actividades.
La URBA, casi tan poderosa en infraestructura como la UAR, decidió no esperar y puso en marcha su propia política, aunque siempre convendría recordar que Buenos Aires forma parte de la UAR. Con un plantel que agrupa a la gran mayoría de los mejores jugadores que actúan en el país, el equipo dirigido por Fabián Turnes y Juan Araujo Müller (Fernando Morel no viajará por motivos personales) tendrá tres compromisos de gran nivel. El 21 enfrentará a los Falcons, en Vanderbijlpark; el 25 a Mpumalanga Pumas, en Secunda y el 25 a los Blue Bulls, en Pretoria.
Así, Buenos Aires llegará al campeonato Argentino con una preparación superior a la de cualquier. Pero para la URBA lo más importante es mostrar el poderío de su equipo en uno de los países más poderosos del rugby, y plantar bandera para una futura proyección internacional.
Y un último dato conocido pero para recordar: mientras Buenos Aires se va a competir a Sudáfrica, Los Pumas siguen sin entrenador y sin que alguien sepa qué va a pasar con ellos.